El día domingo 15 de marzo era una de las fechas agendadas por todos los hinchas de San Luis para el año 2009 y la razón era simple: tocaba visitar al rival clásico como lo es Unión La Calera, equipo que en este comienzo de temporada no ha podido cumplir las expectativas, mientras que los "canarios" están encaramados en los primeros puestos, circunstancia que hacía soñar con otro triunfo más en calidad de forastero como un año antes cuando se ganó por 3 a 2 en el último minuto.
Para el cotejo, el entrenador Diego Osella no contaba con Juan Pablo Miño en el mediocampo y en su puesto ingresó Alejandro Escalona, manteniendo el resto de equipo que enfrentó a Santiago Wanderers y que a todas luces es muy defensivo. De esta manera la formación fue con Luciano Palos, Guillermo Pacheco, Alexis Flores, Fidel Córdoba, Gonzalo Lovera, Mauricio Rojas, Carlos López, Carlos Escudero, Alejandro Escalona, Fernando Alves Machado y Mario Pierani.
A todas luces era un esquema defensivo, aunque en ,los primeros minutos no fue muy evidente el que los quillotanos se defendiesen porque se formó un partido de ida y vuelta donde nadie sacó ventaja. A medida que pasaron los minutos apareció la figura de Hernán Madrid en los locales, quien con su juego y entendimiento con sus compañeros del mediocampo se fueron quedando con el control del balón pese a lo cual no inquietaban al buen portero Luciano Palos de San Luis.
Sin embargo pese a este control del balón por el rival, los "canarios" se las ingeniaban para llegar con peligro en la defensa de Calera. Así se llegó al minuto 10 cuando tras una gran jugada individual el brasileño Fernando Alves Machado remató al arco de Luis Godoy, quien nada pudo hacer para impedir el gol del carioca que definió cruzado y abajo.
Tras esta apertura del marcador, como ha sido la tónica de Diego Osella, los quillotanos retrasaron las líneas para fortalecer la defensa ante los ataques de un rival que se iría con todo en busca del empate y así poder aprovechar la velocidad de Pierani y Alves en un contragolpe. Pero pese a todas las preocupaciones, en el minuto 22 Karin Tapia se escapa por el costado, envía un certero centro que es impactado por el argentino Ariel Pereyra para poner la igualdad a un gol parcial
Luego de esta igualdad, el control del balón se equilibró por ambos clubes y la única posibilidad de peligro seria llegó en los pies de Pierani que desperdició la chance de poner en ventaja a su equipo en el clásico provincial. Por su parte, el ataque de Unión La Calera no mostró gran eficacia y no se podían acercar con peligro y cada vez que lo hacían, la defensa quillotana los conjuraba sin problemas.
Los problemas para San Luis llegaron en la segunda parte cuando el técnico Osella decidió el ingreso de Emanuel Bazán para tener más ataque, pero cuando llevaba algo más de 10 minutos en cancha se lesionó y debió dejar el campo para que ingrese Sebastián Varas en su lugar. Dentro de lo negativo, lo bueno sería que podrían estar juntos Varas y Machado en la generación de fútbol, pero una tontera del brasileño que cayó en la provocación de Luis Medina le significó su expulsión y dejar al equipo con 10 jugadores para el resto del partido.
Este suceso marcó el trámite del partido porque San Luis se dedicó totalmente a defender el empate con uñas y dientes, limitando cualquier posibilidad de ataque a una jugada individual. Por contrapartida los locales de Unión La Calera se fueron con todo en busca del triunfo y Joel Estay tuvo la mejor ocasión cuando estrelló el balón en el travesaño, pero más allá de esa jugada en particular, la defensa de San Luis respondió de manera satisfactoria ante cada embestida del local que una vez más convirtió en figura a Luciano Palos.
Cuando restaban menos de cinco minutos para el final del encuentro, una discutida decisión del arbitro Claudio Aranda decidió la expulsión del defensa de San Luis Gonzalo Lovera tras un quite de balón a Joel Estay. Esto terminó por definir el interés de San Luis por defenderse y asegurar el punto, pese a lo cual en el último minuto Sebastián Varas contó con la gran chance en un contragolpe pero desperdició la oportunidad y terminó el duelo empatado a un gol.
domingo, 15 de marzo de 2009
Muchas expectativas, poca realidad
Durante toda la semana previa a este partido de revancha entre Nacional y Entrepuentes de La Calera por el Torneo Regional ANFA, en ambas ciudades se comentaba del encuentro donde se verían las caras dos de los clubes que más dinero invirtieron para soñar con el título y cada uno de quienes daba su parecer auguraba un alto nivel futbolístico de ambas partes.
Al encuentro del domingo a las 12:30 horas en la cancha de Agroil de Boco en Quillota los caleranos llegaban con la ventaja de haberse impuesto en el partido de ida como locales por 3 goles a 2, obligando a Nacional a los penales para forzar el alargue y los penales en caso de igualdad.
Lamentablemente para el espectáculo, los problemas comenzaron desde el primer momento producto del atraso del trío arbitral que no llegaba desde Limache y sólo arribó al campo deportivo 30 minutos más tarde del comienzo del duelo, teniendo a ambos clubes esperando su llegada. Junto a ellos llegó la fuerza policial para actuar en caso de cualquier atisbo de violencia entre las hinchadas.
Superado el atraso de los jueces, con más de 30 minutos de espera, inició el partido donde Nacional entraba forzado a ganar, tarea que se pensó más fácil luego de la temprana expulsión de Sergio Guzmán en Entrepuentes. Todos tendieron a creer que el dominio inicial se reforzaría al tener un hombre de más en el campo, pero nada más lejos de la realidad porque el juego se concentró en el mediocampo, donde por momentos se abusó de la fuerza, pero esta fricción impidió que se generasen claras oportunidades de peligro en las porterías, siendo los arqueros meros espectadores.
Se esperaba que en el segundo tiempo las cosas mejoraran, esencialmente para un local que necesitaba marcar la ventaja, pero frente a ellos estaba un equipo con mucha experiencia que supo manejar los tiempos y el balón con un hombre menos para impedir que su arco se viese en peligro, tarea que se terminó por simplificar tras la expulsión del delantero Nuñez de los locales por una jugada donde se pudo evitar la sanción.
Esta decisión arbitral terminó por trastocar los planes de Nacional cuyos entrenadores hicieron ingresar a un tercer delantero para ver si así se podía generar más peligro en el arco rival, pero dejando muchas libertades en defensa, instancia que era aprovechada por Entrepuentes para generar peligro, aunque a la hora de los balances, ninguno de los equipos se acercó al pórtico con claras chances de anotar un gol.
Así llegó el minuto 89 cuando tras un certero pase, uno de los delantero de Entrepuentes se fue sólo en busca del arco de Nacional ante los reclamos de los locales que pedían una posición de adelanto que fue muy dudosa, pero el goleador no se inmutó y enfrentó tranquilo al portero Olmedo de Nacional para vencerlo y asegurar el paso de la visita a la siguiente ronda.
Este cobro muy polémico de parte del trío arbitral generó la ira de todos los jugadores e hinchas locales que se fueron en contra del juez de línea que habilitó la jugada previa al gol, pero esto provocó que el juez decidiese terminar el partido por faltas de garantías ya que de acuerdo a su versión fueron golpeados por los jugadores de Nacional cuando discutían la decisión arbitral.
Lo peor llegó tras esto porque las barras se enfrascaron en una pelea donde intervino Carabineros para calmar los ánimos en el lugar, pero lamentablemente para la gente de La Calera, la fuerza policial fue incapaz de prevenir una "emboscada" de parte de los derrotados, quienes apedrearon los micros de los caleranos cuando abandonaban la ciudad, lo que podría haber terminado con visitantes lesionados por un partido de fútbol, donde lo que menos se vio fue calidad de juego.
Al encuentro del domingo a las 12:30 horas en la cancha de Agroil de Boco en Quillota los caleranos llegaban con la ventaja de haberse impuesto en el partido de ida como locales por 3 goles a 2, obligando a Nacional a los penales para forzar el alargue y los penales en caso de igualdad.
Lamentablemente para el espectáculo, los problemas comenzaron desde el primer momento producto del atraso del trío arbitral que no llegaba desde Limache y sólo arribó al campo deportivo 30 minutos más tarde del comienzo del duelo, teniendo a ambos clubes esperando su llegada. Junto a ellos llegó la fuerza policial para actuar en caso de cualquier atisbo de violencia entre las hinchadas.
Superado el atraso de los jueces, con más de 30 minutos de espera, inició el partido donde Nacional entraba forzado a ganar, tarea que se pensó más fácil luego de la temprana expulsión de Sergio Guzmán en Entrepuentes. Todos tendieron a creer que el dominio inicial se reforzaría al tener un hombre de más en el campo, pero nada más lejos de la realidad porque el juego se concentró en el mediocampo, donde por momentos se abusó de la fuerza, pero esta fricción impidió que se generasen claras oportunidades de peligro en las porterías, siendo los arqueros meros espectadores.
Se esperaba que en el segundo tiempo las cosas mejoraran, esencialmente para un local que necesitaba marcar la ventaja, pero frente a ellos estaba un equipo con mucha experiencia que supo manejar los tiempos y el balón con un hombre menos para impedir que su arco se viese en peligro, tarea que se terminó por simplificar tras la expulsión del delantero Nuñez de los locales por una jugada donde se pudo evitar la sanción.
Esta decisión arbitral terminó por trastocar los planes de Nacional cuyos entrenadores hicieron ingresar a un tercer delantero para ver si así se podía generar más peligro en el arco rival, pero dejando muchas libertades en defensa, instancia que era aprovechada por Entrepuentes para generar peligro, aunque a la hora de los balances, ninguno de los equipos se acercó al pórtico con claras chances de anotar un gol.
Así llegó el minuto 89 cuando tras un certero pase, uno de los delantero de Entrepuentes se fue sólo en busca del arco de Nacional ante los reclamos de los locales que pedían una posición de adelanto que fue muy dudosa, pero el goleador no se inmutó y enfrentó tranquilo al portero Olmedo de Nacional para vencerlo y asegurar el paso de la visita a la siguiente ronda.
Este cobro muy polémico de parte del trío arbitral generó la ira de todos los jugadores e hinchas locales que se fueron en contra del juez de línea que habilitó la jugada previa al gol, pero esto provocó que el juez decidiese terminar el partido por faltas de garantías ya que de acuerdo a su versión fueron golpeados por los jugadores de Nacional cuando discutían la decisión arbitral.
Lo peor llegó tras esto porque las barras se enfrascaron en una pelea donde intervino Carabineros para calmar los ánimos en el lugar, pero lamentablemente para la gente de La Calera, la fuerza policial fue incapaz de prevenir una "emboscada" de parte de los derrotados, quienes apedrearon los micros de los caleranos cuando abandonaban la ciudad, lo que podría haber terminado con visitantes lesionados por un partido de fútbol, donde lo que menos se vio fue calidad de juego.
Salida a la cancha de Club Nacional
Deportes Quillota le ofrece a todos sus visitantes el video de la salida de Nacional a la cancha en el partido de vuelta ante Entrepuentes por el Campeonato Regional de Campeones ANFA, donde contaron con el aliento de su hinchada desde las tribunas