En la víspera al trascendental partido frente a Santiago Wanderers como visita, donde San Luis se juega la posibilidad de seguir luchando por el segundo puesto, el elenco quillotano dirigido por Diego Osella se continúa entrenando en Limache y durante la tarde del jueves hicieron la primera práctica futbolística.
Con respecto a la formación, la luz de alerta se encendió tras el trabajo diferenciado de sus compañeros de Alejandro Escalona y Mario Pierani, quienes están aquejados de lesiones musculares que pondrían en duda su presencia el domingo a las 15:30 horas, y pese a la confianza del cuerpo médico y técnico, sus posibles reemplazantes serían el zaguero argentino Gonzalo Lovera y el delantero trasandino Emanuel Bazán.
El caso de Gerson Martínez es especial puesto que pese a que podrá estar presente el fin de semana ante los porteños, la tarde del jueves no pudo ser parte del trabajo liderado por Diego Osella, puesto que se encontraba en la capital trabajando con el entrenador nacional Ivo Basay, después de lo cual realizaría los trámites típicos en caso de viajar al extranjero representando a Chile.
La otra gran novedad sería el regreso a la titularidad de Juan Pablo Miño tras la fecha de castigo, dejando en el banco a Carlos López para hacer dupla con Eduardo Sepúlveda en el mediocampo de destrucción del fútbol rival. De esta forma, el equipo para el próximo fin de semana sería con Luciano Palos en el arco; la defensa estaría formada por cuatro hombres Guillermo Pacheco, Alexis Flores, Fidel Córdova y Gonzalo Lovera en caso de no recuperarse Alejandro Escalona.
Para el mediocampo se dispondría como ha sido habitual en estos partidos de Mauricio Rojas y Carlos Escudero, quienes estarían acompañados en el centro por Juan Pablo Miño junto a Eduardo Sepúlveda que está regresando a la titularidad. Finalmente, como es normal cuando juega en calidad de forastero, Diego Osella dispondría de Fernando Alves Machado cumpliendo la doble función de generar peligro y ser delantero, mientras que la punta de lanza sería Mario Pierani si se recupera.
Un tema que se solucionó después de muchas conversaciones fue el premio en caso de ascender a la primera división, lo que después de varias polémicas se concluyó con que los dirigentes le cancelarán a los jugadores la suma de 31 millones de pesos para que se lo repartan si llegan a cumplir el objetivo de regresar a la primera B, lo que dejó contento a ambas partes.
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