San Luis llegaba a su duelo frente a Santiago Wanderers como local por Copa Chile con la expectativa de poder ganar, ya que sólo de esta manera podrían llegar al próximo clásico ante Unión La Calera de la semana siguiente, pero tras un muy mal rendimiento de los dirigidos por Luis Rodríguez, estos debieron lamentar una nueva caida ante su público por la cuenta mínima, restando sólo esperar el próximo duelo ante su clásico rival por el honor deportivo.
Para este duelo, el técnico de los canarios apostó por un equipo con la base de aquellos elementos que se llevaron el peso de la campaña de la Primera B. Ante esto, los titulares de este domingo fueron Fernando De Paul en el arco; los defensas fueron Hernán Maldonado, Federico Paulucci, Francisco Tapia y Víctor Morales; para el mediocampo estuvieron Carlos López, Guillermo Pacheco, Eduardo Otárola y Pablo Bolados, mientras que en la ofensiva estuvieron Mario Pierani junto a Gerson Martínez.
Los primeros minutos fueron de estudio por ambos elencos, pero rápidamente los sanluisinos comenzaron a controlar el balón en el mediocampo y el primer aviso para los porteños fue en el minuto 5 cuando el juez Angelo Hermosilla anuló un gol a Gerson Martínez por supuesta posición de adelanto, ahogando la alegría local, quienes de todas formas igual mantenían la esperanza de quedarse con los puntos después de un inicio tan prometedor.
Luego de esta incidencia, los quillotanos de todas formas manejaron el ritmo del juego durante la primera media hora, anulando la ofensiva de Wanderers y aprovechando su ímpetu para irse sobre la portería rival en pos de alcanzar la apertura del marcador, pero siempre la acción oportuna del arquero caturro Mauricio Viana fue clave para mantener su arco en cero, dando el estímulo a sus compañeros para mejorar poco a poco.
Los últimos quince minutos de juego fueron de muchas emociones en ambas áreas, puesto que los sanluisinos continuaron con sus intentos sobre el arco de los porteños, quienes por su parte también empezaban a tomar confianza en sus armas futbolísticas para presionar a la defensa local, apurándolos en algunos momentos y provocando algunos errores que estuvieron a punto de terminar en gol, pero la impericia de los atacantes y la buena actuación de los arqueros provocó que al descanso se fueran con igualdad sin goles.
A diferencia de lo que había sucedido en encuentros anteriores, la segunda parte de los canarios fue muy mala, con éstos bajando notablemente su rendimiento y dando a los forasteros de Santiago Wanderers la posibilidad de dominar el juego sin contrapeso, llegando con real riesgo sobre la portería defendida por Fernando De Paul, el que incluso contuvo un penal ejecutado por Franco Quiroga evitando así la apertura del marcador por el instante.
Esta acción le dio un envión anímico a los jugadores de San Luis, quienes en los minutos siguientes contaron con claras opciones de abrir el marcador a través de sus delanteros titulares Mario Pierani y Gerson Martínez, los que lamentablemente fallaron en el finiquito para que el resultado parcial siguiera sin goles, eso hasta que a dos minutos del final una jugada por la zona derecha del ataque de Santiago Wanderers terminó con centro al área, donde apareció Michael Silva que conectó el balón y dejó sin chances al arquero dueño de casa para decretar el 1 a 0 final a favor de los forasteros.
Con esta nueva derrota, San Luis de Quillota quedó matemáticamente eliminado de la versión 2011 de la Copa Chile con sólo cinco puntos a la espera de un encuentro por disputarse, donde tendrán que medirse ni más ni menos que ante Unión La Calera en calidad de local, con la necesidad de ganar este duelo clásico de la provincia, teniendo al menos el aliciente de imponerse en este duelo tan relevante ad portas de reiniciarse el torneo de la primera B 2011.
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