El duelo como visita ante un Everton de Viña del Mar precedido de una gran campaña era muy importante para San Luis de Quillota, puesto que en caso de obtener un buen resultado podrían seguir ilusionándose con llegar a la liguilla de promoción, pero luego de un encuentro demasiado irregular por parte de los quillotanos, los dueños de casa aprovecharon su mejor segundo tiempo para dar vuelta el marcador y quedarse con el triunfo final por tres goles a uno, acercándolos un poco más al ascenso, mientras los canarios deberán seguir trabajando en pos de seguir soñando.
Tras la agónica victoria como local por dos a uno ante Coquimbo Unido, el técnico de San Luis de Quillota Nelson Cossio ordenó una serie de cambios en el equipo para medirse ante los ruleteros, con el ingreso de Francisco Tapia en la defensa, Ángel Rojas en el mediocampo y Gerson Martínez en la ofensiva para retrasar en la creación a Manuel Neira. De esta manera, los once titulres de San Luis fueron Fabián Moyano en el arco; Guillermo Pacheco, Francisco Tapia, Jorge Aguilar, Alejandro Escalona en la novedosa línea de cuatro zagueros; para el mediocampo estuvieron Carlos López, Álvaro Césped, Ángel Rojas y Manuel Neira, mientras que la dupla ofensiva estuvo conformada por el argentino Mario Pierani y Gerson Martínez.
Los primeros minutos fueron a favor de los quillotanos que se aprovecharon del nerviosismo evidenciado por los locales para generarse las primeras opciones de gol del encuentro, siendo la más relevante cuando Alejandro Escalona encaró por su costado y superó sus marcas para ingresar al área de los oros y cielos, donde no dudó para rematar pero su tiro se fue desviado por poco. No obstante, poco a poco los evertoniandos se empezaron a adueñar del balón liderados especialmente por Maximiliano Ceratto, el que empezaba a generar los primeros estragos a la zaga canaria, quienes de todas maneras lograban alejar el peligro.
Cuando mejor empezaban a jugar los viñamarinos, sufrieron un duro golpe cuando San Luis consiguió la apertura del marcador en el minuto 16 cuando Manuel Neira controla la pelota para habilitar a Ángel Rojas, el cual superó a su marcador y antes de enfrentar al portero Dalsasso remató de manera certera para dejarlo sin opciones y acallar a toda la hinchada ruletera que no entendía lo que sucedía sobre el campo de juego, conscientes además de lo complicado que había resultado para su equipo el anotar un tanto a los quillotanos, sobre todo ahora dirigido por Nelson Cossio.
Al verse en desventaja, los viñamarinos se fueron con todas sus armas ofensivas en busca de la igualdad, convirtiendo en figura al portero Fabián Moyano que siempre respondió de buena forma cuando se le exigió, pero a la vez, los dueños de casa dejaron espacios en defensa que estuvieron a punto de ser aprovechados por Mario Pierani y Manuel Neira para aumentar la diferencia, pero Dalsasso de Everton dejó en claro por qué es una prenda de seguridad.
Cuando ya la primera parte se terminaba la primera parte, minuto 42, Maximiliano Ceratto se fue con todo en busca del arco de San Luis de Quillota superando al central Francisco Tapia, pero apareció Fabián Moyano para contener el riesgo, aunque por la espalda el zaguero lo derribo con un empujón, ante lo cual el árbitro Salvador Barea sancionó penal, el que fue ejecutado por Fernando Saavedra que no falló y decretó la paridad parcial justo antes del descanso, por lo que se preveía un complemente con emociones en ambas porterías.
Lamentablemente para los intereses de los quillotanos, al parecer sus jugadores se quedaron en los vestuarios para la segunda parte, puesto que el ingreso de Francisco Silva en Everton de Viña del Mar cambió la historia, puesto que los ruleteros comenzaron a dominar absolutamente todo el juego y anularon el mediocampo de los canarios, quienes debieron limitarse a contener el riesgo y alejarlo desde su portería, algo que conseguían no sin esfuerzo, pese a que estaba la sensación entre los hinchas que pronto las acciones cambiarían de sentido.
Fue así como no sorprendieron los goles ruleteros que llegaron antes del minuto 65 primero a los 58 cuando el volante Álvaro Césped se equivoca en la salida y le deja el balón a Maximiliano Ceratto, el que no duda y remata de manera potente para ponerse en ventaja por dos goles a uno, dejando sin opciones al portero Fabián Moyano, error que de paso le significó al volante su salida del campo de juego, pero ni siquiera este cambio surtió efecto, puesto que sólo siete minutos después, Romo de Everton se escapa por su costado, envía un centro para la aparición de Fernando Saavedra, quien con certero cabezazo anota el tres a uno con que terminó el partido.
Los últimos 25 minutos del encuentro fueron un verdadero monólogo de los ruleteros que no permitieron que San Luis llegara en ninguna ocasión con riesgo buscando el segundo descuento, además que los quillotanos se empezaron a desesperar con sus rivales y de hecho Carlos López se marchó a las duchas antes de tiempo por una falta contra uno de sus rivales, situación que terminó por acrecentar el dominio futbolístico de los viñamarinos, quienes se dedicaron simplemente a dejar pasar los minutos para el pitazo final y festejar una victoria más, algo que los acerca un poco más al sueño del ascenso a la primera división para la temporada 2012.
Por su parte, los jugadores de San Luis no tienen tiempo para lamentarse con esta caída, puesto que rápidamente el jueves 27 de octubre deberán partir de viaje a Puerto Montt, donde el sábado 29 del mismo mes a partir de las 18 horas, se enfrentarán a los locales en el Estadio Chinquhue de dicha ciudad, donde estarán forzados a buscar una victoria para mantener alguna mínima opción de llegar a la liguilla de promoción, instancia que en el año 2009 les significó el derecho a competir en la primera división.
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