Los quillotanos en esta oportunidad formaron con José Aránguiz, Ivo Hernández, Brandon Molina, Juan Molina, Paul Pallacán, Giovanni Parada, Francisco Peña, Matías Pérez, Mauricio Rojas, Raúl Silva, Roberto Zamorano. Luego ingresaron Cristóbal Ortega, Jesús Quilaleo, Isaías Álvarez, Rolando Pizarro.
El encuentro en la primera parte fue de trámite muy parejo, con los visitantes buscando generar opciones de acercarse a la portería rival, mientras que los dueños de casa por su parte intentaban administrar el balón, y ninguna de las dos escuadras tuvo la tranquilidad necesaria para romper la resistencia rival, yéndose al descanso empatados cero a cero.
Al reiniciarse las acciones, Juventud El Bajío se fue al ataque en pos de liquidar la serie, y pareció que lo conseguirían luego que su delantero Juan Molina se escapara por el costado izquierdo, ingresara al área, donde fue derribado, sancionándose penal, el que fue ejecutado por el mismo jugador y convirtió el uno a cero parcial. Sin embargo, a la jugada siguiente los visitantes consiguieron el empate con un certero cabezazo tras un centro desde la derecha, estableciéndose el uno a uno momentáneo.
Los últimos instantes del cotejo fueron de total intensidad, con los forasteros yéndose en busca de tener una mínima opción para ganar el encuentro, mientras que Juventud El Bajío intentó mantener el empate en el marcador, objetivo que consiguieron para así pasar a la próxima ronda con un total de cuatro puntos en la sumatoria total.
En la próxima ronda enfrentará a la escuadra de Unión Miramar, quienes en la primera fase se midieron ante Club Alto Florida de Quilpué, empatando como visita uno a uno en cancha de tierra, mientras que en el cotejo de vuelta como locales se impusieron por tres goles a dos, sumando un total de cuatro puntos, al igual que los quillotanos.
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