San Luis se impuso en la última fecha del Campeonato de Primera B.

Luego del triunfo como local ante Lota Schwager como dueño de casa, la semana previa al último duelo de San Luis de Quillota por el campeonato oficial 2011 se vio convulsionada desde el principio, iniciando con un inesperado cambio de fecha para el duelo desde el domingo para el jueves, pero los dirigidos por Nelson Cossio se lograron sobreponer a todas las dificultades para viajar hasta Curicó y ganar a los dueños de casa por dos goles a uno, reiterando una vez más la historia del año 2009 en que se impusieron por liguilla de promoción que dio el ascenso a los canarios.

Para este encuentro, el técnicos de los amarillos confió en los mismos jugadores que se impusieron en la fecha previa, salvo la modificación obligada por el lesionado Alejandro Escalona, lo que representó de paso una gran sorpresa porque significó el regreso a las canchas de Jhon Valladares después de una seria lesión que lo dejó varios meses sin poder disputar ningún encuentro. Los titulares del jueves ante Curicó Unido fueron Fabián Moyano en el arco; Eusebio Díaz, Jorge Aguilar y Federico Paulucci en defensa, para el mediocampo estuvieron Guillermo Pacheco, Álvaro Césped, Carlos López y Jhon Valladares, dejando en la creación a Jesús Silva, mientras que para anotar los goles estarían Gerson Martínez junto al argentino y uno de los símbolos Mario Pierani.

Los primeros diez minutos de juego fueron levemente superiores para el equipo de San Luis que llegaban con balones aéreos sobre la defensa de un Curicó Unido que llegaba presionado y obligado a ganar para no finalizar en el último lugar de la tabla de posiciones. Tras ese inicio dubitativo, los jugadores del dueño de casa comenzaron a relajarse y controlaron el balón en el mediocampo, lo que les dio paso a que inquietaran al portero Moyano mediante lanzamientos desde media y larga distancia, los que intranquilizaban a los canarios, pero de todas maneras controlaban las llegadas curicanas.

Cuando más se acercaban los sureños a la portería quillotana, en el minuto 28 llegó la primera alegría para los canarios cuando Jesús Silva envía el centro certero para que cabeceara Gerson Martínez, cuyo remate pegó en el poste y la pelota rebotó en la espalda del arquero curicano Leonardo Zamora, momento en que apareció el central argentino Federico Paulucci que como un centrodelantero nato remató para convertir el uno a cero parcial, anotando su segundo tanto personal en el año.

Luego de esta anotación, los jugadores de Curicó Unido intentaron revertir la historia mediante su delantero Ariel Pereyra, el que aprovechó un pase de Martín Cortés para rematar de chilena, pero Moyano actúa de manera soberbia para enviar al córner. En el contragolpe, Gerson Martínez gana en velocidad a su marcador y recibe un pase en profundidad, pero en el momento preciso trastabilla, lo que le da el tiempo preciso al central Juan Carlos Muñoz para mandar al córner, brindando al público un muy buen encuentro con llegadas en ambas porterías, aunque aún quedaban emociones antes del descanso.

En el minuto 40 de la primera parte, una vez más Gerson Martínez recibe un pase en profundidad, peina el balón sobre Zamora y éste se ve en la obligación de derribarlo, por lo que el juez sancionó penal, que fue ejecutado por Mario Pierani que no falló y colocaba el dos a cero parcial. Pero cuando aún no terminaban los festejos del equipo de la Quinta Región, Alejandro Kruchowski remató en el minuto 43 y la pelota pega en la mano de Jorge Aguilar, el juez sancionó penal, ejecutado sin problemas por Ariel Pereyra para colocar el dos a uno parcial justo antes del descanso.

Después del entretiempo, las acciones pertenecieron totalmente a un conjunto de Curicó Unido que buscaba con más ganas que fútbol el empate parcial, pero la soberbia actuación de la defensa de San Luis y su portero Fabián Moyano alejaban todo riesgo que pusiera en peligro un triunfo muy importante para cerrar el año, aunque la intranquilidad se comenzaba a apoderar de los poco hinchas quillotanos presentes en el estadio que veían como no tenían ningún poder ofensivo, dedicándose simplemente a contener los consecutivos embates ofensivos de un rival que no encontraba la llave para el gol de la paridad.

Las cosas cambiaron en algo tras el ingreso de Manuel Neira, el que primero tuvo una buena oportunidad de aumentar la diferencia cuando su remate pasó muy cerca del arco sureño, mientras que en el minuto 76 llegó la gran opción de liquidar el duelo, puesto que Manuel Neira habilitó a Mario Pierani, el que ingresa al área de Curicó Unido donde es derribado por el central Juan Carlos Muñoz, obligando al juez a que sancionara un nuevo lanzamiento penal, el que en esta ocasión fue ejecutado por Manuel Neira, quien de manera displicente tiró al cuerpo de Leonardo Zamora, desperdiciando la gran chance.

Obviamente después de esta jugada, los dueños de casa se fueron con más ímpetu en busca de la igualdad definitiva, pero fallaron en la puntada final haciendo más simple la labor defensiva de los visitantes, los que resistían la victoria lo mejor que les era posible hasta que la violencia obligó a terminar con el duelo antes del tiempo reglamentario, cuando la hincada de Curicó Unido agredió a la decena de hinchas de San Luis presentes en el recinto deportivo, quienes tuvieron que escapar hasta la cancha y, por ello, el juez decidió dar el partido por terminado con victoria para los canarios por dos goles contra uno.

Luego de este triunfo, San Luis escaló al cuarto lugar del Campeonato de Clausura, situación que los deja expectantes a lo que pueda acontecer con Everton de Viña del Mar y Naval de Talcahuano, quienes podrían sufrir la pérdida de algunos puntos, lo que en caso de concretarse, significaría que los canarios tendrían alguna mínima opción de llegar a la liguilla de promoción, aunque más allá de eso, tanto el cuerpo técnico como los jugadores manifestaron estar felices por el hecho de poder haber terminado el año de una buena forma con tres triunfos en los últimos cuatro duelos.