Para comenzar la actividad deportiva, el último campeón de Quillota Nacional se enfrentó ante su similar de José Fernández de Puchuncaví, quienes protagonizaron un duelo muy parejo desde el comienzo, pero que finalmente favoreció a los anfitriones por un ajustado marcador de dos goles contra uno, clasificando de esta manera a la gran final, esperando conocer a su rival.
Mientras ellos descansaban, se disputaba la otra semifinal entre el Club Dínamo y Rayón Said, dos conjuntos que dieron su máximo esfuerzo en el campo de juego y por momentos ello generó roces, aunque todo se definió en el campo a favor de los monarcas regionales por un marcador final de cuatro a dos, aunque aquello no refleja el desarrollo del juego, puesto que por muchos momentos los rayoncistas estuvieron igualados en el marcador.
Para finalizar la actividad, se llevó a cabo la gran definición entre Dínamo y Nacional, en que los primeros deberían luchar contra el desgaste físico, algo que les pasó la cuenta al ser incapaces de desarrollar su juego en plenitud, siendo dominados en muchas partes del juego, aunque apelaron a su poder de finiquito para irse en ventaja por un gol a cero gracias a la anotación de Arón Muñoz.
Luego del descanso, el desarrollo del partido fue muy electrizante con ambos equipos yendo en busca de la victoria final y a los diez minutos del complemento el juez sancionó un penal a favor de Nacional, el que fue ejecutado por Adrián Arancibia, pero el portero dinamista José Aránguiz contuvo, aunque dando rebote y apareció el ejecutante para disparar una vez más y decretar la igualdad momentánea. Cuando los nacionalistas no terminaban de festejar, apareció Jaime Román en el minuto 17 para controlar un largo pase diagonal y rematar para dejar sin opción al portero rival.
Luego de esta nueva ventaja para los representantes de Quillota en el Torneo Nacional, Dínamo empezó a manejar el balón para dejar pasar el tiempo, mientras que Nacional se iba con más ímpetu que fútbol en busca de la igualdad, lo que consiguió mediante una gran jugada personal de Lizardo Pérez en el minuto 24 del complemento que anota la paridad a dos goles con remate cruzado desde el límite del área. Cuando los hinchas ya se preparaban para la definición por penales, en el minuto 26 de la segunda parte apareció el volante Luis Aránguiz para dar la victoria definitiva a Dínamo con un sorpresivo remate elevado que dejó sin chances al portero de Nacional y dejó el título para Dínamo.
