Una derrota que sólo confirmó el descenso

Después de 23 años de lucha por llegar a la primera división, finalmente el sábado 13 de noviembre con la derrota ante Universidad de Chile se concretó estadísticamente algo que hace varias fechas se sabía, sobre todo analizando el rendimiento futbolístico, como es el regreso de San Luis de Quillota a la primera B, cerrando de esta forma una temporada 2011 con muchos errores

Los quillotanos llegaban a este cotejo conscientes que sólo un milagro los podría mantener en la serie de honor, pero el técnico señaló en la semana que lucharían hasta el final y le darían la posibilidad a jugadores jóvenes para que tomen experiencia en estos duelos, pero nada de eso pasó ya que siguieron jugando los mismos y éstos no mostraron sentir la derrota más dolorosa del año

Para esta ocasión ante la Universidad de Chile los once titulares fueron Luciano Palos en la portería, Guillermo Pacheco, Carlos Escobar, Jorge Vargas y Alejandro Escalona en la defensa, Patricio Pérez, Cristián Uribe, Matias Vidangossy y Fernando Alves Machado en la creación dejando en ofensiva a Joel Soto junto a Hernán Peirone

Los primeros instantes del encuentro fueron muy parejos con leve dominio de Universidad de Chile, aunque en ningún momento contaron con una chance contundente de abrir el marcador, eso hasta que llegó el minuto 18 cuando Guillermo Marino encara por la izquierda, es derribado en el área grande por Luciano Palos y el juez sancionó penal, el que fue ejecutado por Diego Rivarola para abrir la cuenta

Después de este gol en contra, los jugadores de San Luis sintieron el golpe y no podían reaccionar, lo que fue aprovechado por los jugadores de Universidad de Chile para llegar con reales jugadas de riesgo sobre el arco de Luciano Palos, pero con el paso de los minutos Hernán Peirone se las ingenió para llegar con peligro sobre la portería de Miguel Pinto, pero sólo ante la zaga rival era poco lo que podía hacer

El comienzo de la segunda parte fue muy bueno para San Luis, cuyo delantero Joel Soto contó con dos ocasiones de anotar el empate a un gol en dos jugadas mano a mano ante el arquero rival, pero falló en el finiquito y eso no fue perdonado por los azules, quienes a través de Carlos Bueno convirtió dos nuevos goles para el tres a cero final, primero al cabecear un centro de Nelson Pinto y luego asociándose con su compañero de ofensiva Gabriel Rivarola

Éstos dos nuevos goles fueron el golpe definitivo para los canarios, los cuales de esta forma se iban definitivamente de regreso a la primera B, situación que no los hacía reaccionar salvo dignas excepciones como Hernán Peirone, quien en una nueva jugada personal es derribado en el área de Universidad de Chile, sancionan penal, el que es ejecutado por Joel Soto, pero su remate es contenido por Miguel Pinto

Luego de estas circunstancias, los universitarios sólo comenzaron a manejar el balón para esperar el final del encuentro, mientras que en San Luis los jugadores sólo esperaban ansiosos el pitazo final para retirarse al camarín, olvidándose de esta forma de la pésima campaña del año 2010