San Luis de Quillota venció en Viña del Mar y renació la ilusión.

Una semana complicada tuvo San Luis de Quillota tras la dura caída ante Santiago Morning por seis goles a tres como local, ya que junto a la derrota sufrieron la expulsión de tres jugadores claves en su esquema defensivo, pero los canarios se lograron sobreponer a todas estas dificultades para terminar imponiéndose por la cuenta mínima a Everton de Viña del Mar, con anotación de Alfredo Calderón, dejando en claro una vez más la paridad que existe en la competencia en la Primera B, certamen donde nadie puede consagrarse en el primer lugar.

Producto de las sanciones, el técnico de los quillotanos Nelson Soto tuvo que realizar una serie de cambios en su esquema para enfrentar a los ruleteros, destacando el ingreso como titular de Daniel Vicencio y un esquema netamente ofensivo, con cinco jugadores que en la previa tenían espíritu ofensivo. De esta manera, los titulares de San Luis fueron Fabián Moyano, Daniel Vicencio, Jorge Aguilar, Eusebio Díaz, Ganriel Vilches, Cristián González, Alfredo Rojas, Leonardo Olivera, Sebastián Varas, Bibencio Servín y Alfredo Calderón, mientras que en la segunda parte ingresaron Eduardo Sepúlveda, Rodrigo Pereira y Jean Meneses.

Por su parte, Everton de Viña del Mar entró al campo de juego con Gustavo Dalsasso, Jonathan Suazo, Alex Von Schwedler, Luis Alegría, Carlos Herrera, Francisco Silva, Jorge Romo, Ángel Rojas, Maximiliano Ceratto, José Luis Muñoz junto a Jonathan Novoa, y en el transcurso del juego ingresaron Santiago Bianchi, Matías Blásquez y Alejandro Maureira para intentar cambiar la historia.

Los primeros minutos del encuentro fueron muy parejos con ambos elencos yendo en busca del triunfo, pero sin mayores opciones de riesgo aunque poco a poco los dueños de casa se adueñaron del balón y con la velocidad de José Luis Muñoz y Maximiliano Ceratto colocaban en problemas a los improvisados laterales canarios, quienes poco podían hacer ante la habilidad de los viñamarinos que remataban constantemente a la portería defendida por Fabián Moyano, quien siempre respondió de buena manera ante los intentos de sus rivales que se empezaban a desesperar al no poder abrir el marcador, generando la preocupación en la hinchada local.

Esto se profundizó a partir del minuto 30 de la primera parte cuando se asociaron Sebastián Varas y Alfredo Rojas para que este último rematara desde fuera del área y estrellara el balón en el poste, siendo el primer aviso de riesgo de los canarios, quienes no se conformaron con ello y fue así como en el minuto 39 Cristián González lucha una pelota en el área ofensiva, cede a Sebastián Varas que regresaba de una posición de adelanto no sancionada, el volante envío un certero centro al área para que el espigado delantero Alfredo Calderón conectara de cabeza y anotara el uno a cero parcial.

El golpe de estar en desventaja ante su público pesó en los jugadores viñamarinos que se empezaron a desesperar para ir en busca de la igualdad antes del descanso, pero Fabián Moyano alejó el peligro, mientras la delantera de los quillotanos estuvo a punto de liquidar un poco más el cotejo con jugadas primero de Bibencio Servín y luego Alfredo Calderón, pero no tuvieron la claridad para derrotar al excelente portero Gustavo Dalsasso, extendiendo la máxima emoción para la segunda parte.

Tras el entretiempo, los dueños de casa se fueron con todo en busca de la paridad, pero entre la defensa canaria y la gran actuación de Fabián Moyano terminaron alejando todo el peligro de su área, desatando el nerviosismo en el equipo de Everton que dejaban muchos espacios en la defensa, algo aprovechado por Alfredo por sus certeras habilitaciones primero a Olivera, después a Calderón y finalmente a Meneses, ninguno de los cuales pudo derrotar en el mano a mano al arquero argentino Gustavo Dalsasso que una vez más se convertía en la figura del encuentro para los ruleteros, quienes se volvieron a ilusionar con la posibilidad de dar vuelta el marcador cuando el juez del encuentro César Deischler expulsó al joven Daniel Vicencio por doble amarilla, dejando a San Luis con un jugador menos en el campo.

A partir de allí fue prácticamente un monólogo de los viñamarinos que controlaron el balón y lo manejaron en el mediocampo, pero fueron incapaces de poder aprovechar su hombre de más en el campo de juego para alcanzar el empate parcial, topándose en cada una de las ocasiones con la excelente labor de la defensa canaria liderada por el capitán Jorge Aguilar y Eusebio Díaz, los cuales cada vez que fueron sobrepasados contaron con el trabajo del argentino Fabián Moyano en el arco, entre quienes controlaron todas las ofensivas rivales para asegurar el triunfo final a favor de San Luis por la cuenta mínima, resultado que les permite escalar hasta el tercer lugar.