viernes, 22 de abril de 2011

El mítico Freddy Bahamóndez vuelve a Quillota a compartir su zurda mágica

Se le ve contento y dichoso. Aunque su rostro vetusto por los avatares de la vida pareciera que dijera otra cosa. Freddy Bahamondes Jiménez, hoy de 55 años, vuelve a su tierra prometida, ésa que se alborotó con su zurda mágica cuando vestía la camiseta de San Luis a principios de la década de los ’80. Se mueve con calma por la renovada cancha del Estadio Bicentenario Lucio Fariña, rodeado de niños pertenecientes a la Escuela de Fútbol de la Municipalidad de Quillota y que a partir de abril es la nueva casa del popular “Guatón”.

Atrás quedan los sinsabores de la vida. Esa madrugada de febrero de hace casi un año que lo encontró en Talcahuano mientras el piso remecía los cimientos, porque el terremoto y posterior tsunami sorprendieron a Bahamondes en pleno epicentro. “No sé cómo pero en cuestión de segundos tomé a mi nieta en brazos y salí de la casa con mi señora y mi hija”, recuerda. No lo perdió todo, pero las secuelas sicológicas fueron más y decidió dejar su trabajo de guardia en una pesquera para buscar nuevos rumbos en Quilpué.

Ahí estaba cuando se reencontró con su amigo Víctor “Pititore” Cabrera, quien lo convenció para que volviera a vestirse de corto. “A lo más me las había dado de entrenador en Maipo en Tercera División y en otro equipo amateur, pero nada importante”. La Casa del Deporte de la Municipalidad de Quillota recogió el guante y lo aceptó gustoso. “Freddy es un ídolo para un generación importante de quillotanos que vieron en su calidad futbolística quizás a uno de los mejores equipos de San Luis de todos los tiempos”, dice Manuel Olivares, coordinador de la entidad y responsable de la contratación del ex volante que también vistió la camiseta de Chile en un Sudamericano de 1975.

La misión de Bahamondes será la de motivar el fútbol entre chicos de entre 9 y 10 años, tarea en la que es acompañado por sus compañeros de entonces, Mario Figueroa y Carlos Sandoval. “El Estadio Bicentenario es magnífico y ojalá los jugadores de mi época hubieran tenido este recinto. Da gusto trabajar aquí”, señala, haciendo alusión a ese equipo sensación que también tuvo a Jorge “Pindinga” Muñoz, Patricio Yáñez y Uruguay Graffigna, entre otros.

Pero el hombre de la zurda mágica no se contenta con su nuevo trabajo y rápidamente se autoimpone exigencias. “Tenemos que ser capaces de encontrar talentos para San Luis, para que estos chicos en 7 u 8 años más sean una realidad, porque hoy el fútbol te ofrece la mesa casi servida, a diferencia de nosotros que vivimos otra realidad”, reflexiona.

Efectivamente, Bahamondes pudo haber vivido otros tiempos. “Tal vez con la plata que se mueve ahora hubiera jugado en Europa”, sentencia. Pero la vida y las circunstancias lo pusieron otra vez en su punto de partida. Hoy con más años a cuestas, pero con la sabiduría del hombre de pueblo que espera alguna buena vez traspasar ese talento a aquel chico que quiera escucharlo.

1 comentario:

luis guerra dijo...

Me alegro mucho por esta noticia y siento orgullo de conocer al frecchy bahamondez y mas encima es de mi querido y amado pueblo MAIPO,le deseo lo mejor,mucha buena onda saludos cordiales
atte luis guerra