San Luis luchó, pero perdió en el final.

Después de dos años sin jugar entre sí, finalmente el pasado domingo 10 de julio en el Estadio Nicolás Chahuán Nazar de La Calera se volvió a repetir el clásico provincial entre los locales y San Luis de Quillota, quienes pese a estar en diferente división volvían a jugar gracias a la Copa Chile, certamen en que los cementeros tomaron una leve ventaja después de la victoria por la cuenta mínima sobre el final del pasado fin de semana, aunque ambos cuadros permanecen con las chances intactas de clasificar a la siguiente ronda.

Para este duelo, dejando atrás las rotaciones de los partidos anteriores, el técnico de San Luis de Quillota Luis Rodríguez decidió incluir en el equipo titular a varios de aquellos que se han llevado el peso de la campaña de la primera B, destacando el arquero Richard Leyton, el defensa Francisco Tapia, el volante Pablo Bolados y los delanteros Mario Pierani con Manuel Neira. De esta forma, los titulares de los canarios fueron Richard Leyton en el arco; Hernán Maldonado, Francisco Tapia, Federico Paulucci, Víctor Morales, Pablo Bolados, Álvaro Césped, Eduardo Otárola, Jesús Silva, Manuel Neira y Mario Pierani.

Los primeros minutos fueron sin grandes emociones, destacando el aliento de la hinchada quillotana que se trasladó hasta la vecina ciudad para dejar en claro su apoyo independiente del lugar donde se juegue. En lo que respecta a los futbolístico, los 45 minutos iniciales fueron de mucha lucha en el mediocampo, sin ninguno de los dos conjuntos capaces de tomar el control y acercarse con riesgo real sobre la portería rival, dejando en claro que a la hora de los clásicos, las diferencias desaparecen sobre el campo de juego.

La oportunidad más destacada para los canarios en la primera mitad fue un tiro libre de Pablo Bolados que pasó muy cerca del arco defendido por el trasandino Lucas Giovini. Esta llegada despertó a los locales, quienes empezaron a manejar la pelota en el mediocampo, pero incapaces de poder finiquitar en el área rival, donde su delantero Diego Cuéllar prácticamente no tuvo acción y el volante creativo calerano Fernández fue de buena forma controlado, para asegurar de esta forma la igualdad sin goles al final del lapso inicial.

Tras el descanso, el comienzo fue totalmente diferente, con más emociones sobre cada una de las porterías y en un inicio quienes adquirieron mayor presencia fueron los cementeros que primero a través de Octavio Pozo exigieron al máximo al arquero Leyton, que de todas formas pudo contener su remate. Como respuesta, guiados esencialmente por Mario Pierani, los canarios intentaron inquietar al arquero Lucas Giovini, quien una vez más demostró sobre el campo de juego el por qué ha sonado como probable refuerzo en clubes como Universidad Católica.

Al observar que los minutos pasaban y eran incapaces de llegar al gol, el técnico de los locales Emiliano Astorga rápidamente realizó sus tres cambios con un espíritu evidentemente ofensivo, los que le dieron sus frutos finalmente en el minuto 81 cuando el delantero Brian Rodríguez conectó un certero centro desde la derecha, le cambió su dirección para dejar sin chances de contener al arquero quillotano y decretar de esta forma el uno a cero con que terminó el duelo.

Después del gol en contra, los canarios se fueron en pos de conseguir el empate pero les faltó profundidad en los tres cuartos de cancha contrario, lo que junto a la buena actuación del portero Giovini de La Calera terminaron por asegurar la victoria final de los locales por la ventaja mínima, los que así esperan con más confianza su próximo duelo como local ante Everton, mientras que San Luis el miércoles se pondrá al día como visita ante el mismo rival, para luego recibir como local sus últimos dos diuelos con la fe en clasificar a la siguiente fase.