Desde esta semana comienza proceso de Presupuestos Participativos Deportivos 2018.

Una de las apuestas más importantes del Alcalde Luis Mella junto al Concejo Municipal a lo largo de su gestión tiene relación con el apoyo a las diferentes organizaciones de la comuna, algo que en el área de actividad física se ha plasmado a través de Presupuestos Participativos Deportivos, instancia en que son los mismos socios de cada una de las instituciones los que deben decidir en qué invertir los recursos, proceso que se repetirá en este 2018 con un fondo que alcanzará los 35 millones para potenciar el desarrollo del deporte en la ciudad.

Para el 2018 estos fondos se distribuirán de la siguiente manera: $2.500.000 para cada uno de los proyectos de asociaciones de fútbol; $ 1.800.000 para proyectos de otras asociaciones y los clubes tradicionales; mientras que los clubes y deportes emergentes podrán postular a $1.000.000. Es clave en Presupuestos Participativos Deportivos el hecho que se realizará una votación voluntaria, libre, democrática y de participación social, estableciéndose locales en los recintos que ellos mismos decidan, todo bajo la supervisión de funcionarios municipales.

Podrán ser parte de este proceso instituciones deportivas que tengan personalidad jurídica y directiva vigente, que se hayan constituido legalmente hasta el 31 de diciembre de 2017, no tengan rendición de cuentas pendientes con la Municipalidad de Quillota, los cuales deben presentar tres proyectos con una cotización cada uno, sin olvidar que deben registrar lugar de residencia en Quillota. Asimismo, quienes deseen participar deberán cumplir un mínimo de votantes para que los recursos sean asignados, asegurando así la participación de los socios.

Es importante mencionar que estas inversiones buscan materializar los diferentes proyectos, pero siempre que sean acordes al plan de desarrollo comunal, ya sea en zona urbana o rural, exceptuando eventos con fines de lucro. Una de las innovaciones es que esta distribución de recursos se realiza a través de un proceso democrático de participación, donde son vecinos, socios y deportistas los que deberán debatir sobre las necesidades particulares de cada una de las organizaciones, proponiendo soluciones que se transformen en proyectos.