domingo, 5 de abril de 2009

Para ganar no basta con poner delanteros

Luego del partido ante Deportes Concepción en el sur, algunos simpatizantes de San Luis comenzaron a comentar sobre el técnico Diego Osella y su sistema de juego que siempre privilegiaba la defensa sobre el ataque, arma que utilizaron para atacarlo incluso algunos medios de comunicación pese a que se obtenían resultados importantes, aunque eso no importaba al parecer.

En medio de este ambiente y con la posibilidad de poder contar con el plantel en completo excepto sólo Carlos López, el técnico Diego Osella preparó el equipo para recibir la visita de un encumbrado Naval de Talcahuano que realizó una serie de cambios tras la derrota como local ante Melipilla.

Para esta oportunidad el entrenador argentino de San Luis Diego Osella repitió el equipo con dos delanteros y un enganche, además del regreso de Guillermo Pacheco en el lateral Derecho. De esta manera los once titulares fueron Luciano Palos, Guillermo Pacheco, Alexis Flores, Fidel Córdoba, Alejandro Escalona, Juan Pablo Miño, Mauricio Rojas, Carlos Escudero, Fernando Alves Machado, Gerson Martínez y Mario Pierani.

Los primeros instantes del cotejo fueron de estudio hasta que llegó el minuto 9 cuando tras una gran jugada de Fernando Alves Machado, le cometen falta, el brasileño remata la falta y tras una serie de rebotes el balón quedó en los pies de Carlos Escudero, quien no desaprovechó la oportunidad y puso el 1 a 0 parcial para los quillotanos que hacía ilusionarse a los locales de San Luis.

La visita de Naval sintió el golpe y comenzó a hacerse con el dominio del balón y generar peligro en el arco de Luciano Palos, primero por medio de Octavio Pozo que no pudo acertar a la portería con el globito que le realizó al portero quillotano cuando corría el minuto 22, mientras que en el minuto 35 Pereira envía un disparo por sobre de la portería tras un tiro libre.

Sin embargo, el trámite del cotejo se vio modificado tras la expulsión del argentino Juan Pablo Miño tras una entrada desde atrás, acción que se vio muy violenta pero que los medios de comunicación señalaron que fue una exageración la expulsión. Este hecho que una vez más se repite en los "canarios" no fue aprovechada por la visita para generar jugadas de real peligro pero sí provocó la modificación de esquema y nombres por Osella, quien en el entretiempo ordenó el ingreso Eduardo Sepúlveda en lugar de Gerson Martínez para no perder la marca en el centro del campo sacrificando una vez más al goleador quillotano.

Las cosas parecieron equipararse rápidamente en la segunda fracción puesto que cuando se llevaban sólo tres minutos una acción infantil de César Reyes que dio un codazo alevoso al brasileño Fernando Alves Machado le significó salir del campo expulsado y dejar una vez más a mabos elencos con igualdad de jugadores.

Cuando corría el minuto 11 del segundo tiempo se registró la primera llegada con real peligro de San Luis, ya que tras una gran maniobra personal de Fernando Alves Machado, éste cede el balón a Pierani que ingresa al área donde es derribado pero el juez del cotejo no sancionó el supuesto penal. Tras cartón, en el minuto 15 del complemento, tras un tiro de esquina para los sureños, el balòn es cabeceado y Palos no puede retener, dando rebote que fue aprovechado por Freddy Tapia para la igualdad definitiva en el marcador.

Esto generó que Osella modificara rápidamente el equipo para intentar ir por la victoria y contrario a lo que decían algunos durante la semana, mostró todo su lado ofensivo con el ingreso de Felipe Arancibia y Sebastián Varas, manteniendo en cancha a Pierani y Alves, con lo que poseían cuatro agentes ofensivos, aunque eso no significó gran peligro para los sureños que sólo sufrieron con el remate al travesaño tras un disparo de Fernando Alves Machado, pero eso fue insuficiente para batir la resistencia visitante que resitió el empate a 1 gol hasta que el juz Campusano (de mal cometido) decretó el final del encuentro.

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